Manifestantes argelinos desempleados y miembros de las fuerzas de seguridad se enfrentaron ayer violentamente en la provincia argelina de Bumerdés, vecina a la de Argel. En esta coyuntura, todos los ojos están puestos en la manifestación convocada el próximo sábado en Argel que, según los organizadores, se celebrará pese a no estar autorizada por el Gobierno.