La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del colegio Trajano manifestó ayer su oposición al traslado de la parada de taxis de la plaza de España a la calle Santa Julia, frente a uno de los accesos al centro, que se materializó ayer. El AMPA consideró ayer que el trasiego de coches supone un riesgo para las entradas y salidas de los escolares. Antes, se quejó también de la instalación de una valla a 1,80 metros de la puerta, que los operarios habían comunicado a la dirección, pero la delegada de Tráfico, Raquel Bravo, y el de Obras, Francisco Miranda, se acercaron por la mañana a entrevistarse con el director y descartaron esta opción asegurando que dejarán más espacio. Los representantes de los padres, sin embargo, no creen suficiente esta modificación y piden en un comunicado una reunión con Bravo, sin descartar, "en caso de negativa, tomar otro tipo de medidas de presión".

El director del centro, Antonio Isidoro García, también había previsto solicitar una reunión con la delegada de Tráfico. "El miércoles nos dijeron los operarios que iban a colocar una valla a 1,80 metros de la puerta, y nos preocupó que no dejarn espacio suficiente para facilitar el acceso y salida de los alumnos, sobre todo en una posible emergencia", explicó. Sin embargo, antes de que le llegara dicha petición, Bravo se desplazó con Miranda al centro, al tener conocimiento de que había dudas sobre la instalación de la parada de taxis en la zona.

Hasta ahora, en la calle Santa Julia había seis plazas de aparcamiento, tres de personal autorizado (para uso del consistorio), una para personas con discapacidad y otras dos de la Consejería de Educación, recientemente trasladada al Tercer Milenio. Con el cambio de la parada de taxis, se han creado dos plazas más, delante del acceso al colegio por esa vía (tiene otros dos por Trajano y Félix Valverde Lillo), que ocupan parte de lo que hasta ahora era acerado. Pese a ello, Bravo y Miranda garantizan que queda espacio suficiente para facilitar el acceso al colegio, puesto que habrá unos tres metros de ancho, delimitados por unas vallas, y unos cuatro de largo, donde se colocarán los maceteros que había hasta ahora.

Para el AMPA, esta medida no es suficiente, puesto que la mayor presencia de vehículos en la zona eleva el peligro para las entradas y salidas de los escolares, por la mañana y por la tarde. Bravo responde que hasta ahora también había aparcamientos que utilizaban vehículos e incluso considera que el peligro puede reducirse, por ser los taxistas conductores profesionales y por estar mejor regulado el estacionamiento en la zona.