El sindicato CCOO criticó ayer la precariedad en los contratos de la segunda fase del Plan de Empleo Social y avanzó que estudia adoptar medidas para eliminar la "discriminación" que sufren las personas seleccionadas en el último programa, a quienes "el ayuntamiento no quiere aplicar el convenio colectivo de personal laboral". El sindicato explica que los beneficiarios han sido contratados por un salario "muy inferior" al que establece el convenio colectivo del ayuntamiento "para una persona de la misma categoría profesional", lo que se traduce en una reducción de sueldo del 40% respecto a lo que cobraron los contratados con cargo a la primera fase de programa.

Para CCOO esto supone una "discriminación" entre las personas contratadas en las dos fases, e incluso "entre personas que realizan el mismo trabajo, simplemente por el hecho que unos tienen un contrato temporal y otros cuentan con contratos indefinidos". El sindicato recordó que la legislación laboral prohíbe este tipo de prácticas por no ajustarse a derecho y ser discriminatoria entre las personas que realizan un mismo trabajo. La organización ya está hablando con los trabajadores afectados y al mismo tiempo ha comenzado a organizarse para "reclamar los derechos de estos empleados municipales".

Las críticas por el salario llegan después de la polémica generada en torno a los procesos de selección, por lo que CSIF ya pidió al ayuntamiento que negocie las bases con los sindicatos.