El equipo de Gobierno local ha solicitado una prórroga al Ministerio de Economía para la elaboración de un nuevo plan de saneamiento, el tercero desde 2007, destinado a solventar el desequilibrio financiero --un informe del interventor general del ayuntamiento lo cifra en 8,5 millones de euros y un remanente de tesorería negativo de 3,7 millones de euros-- que afecta a las arcas municipales. La liquidación de las cuentas del 2009 se aprobó el pasado mes de octubre, por lo que el ayuntamiento tenía tres meses para elaborar un nuevo plan para sanear las cuentas municipales después de que el anterior, aprobado en 2009, no cumpliera con los objetivos.

Según indica la portavoz municipal, Estrella Gordillo, se ha solicitado una prórroga con el objetivo de elaborar el nuevo plan en base a los datos de la liquidación del año 2010, con el fin de ajustarse lo máximo posible a la situación real de las arcas municipales.

Ahora habrá que esperar varios meses hasta conocer los resultados del año que acaba de concluir, por lo que probablemente será el nuevo gobierno resultante de las elecciones de mayo el que deba proponer el nuevo plan de ajuste.