La empresa de restauración Regal y el Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida van a llevar a cabo el proyecto de adecuación de la piscina de decantación del acueducto de los Milagros y la conducción previa, situada en la barriada de Santa Eulalia. El proyecto será financiado por la Confederación Hidrográfica del Guadiana.

Los trabajos consistirán en la limpieza y documentación del conjunto, que ha sido objeto de múltiples actos vandálicos y que está afectado por hogueras, pinturas, cemento o basura; el drenaje de las aguas que se acumulan formando enormes charcos; y la consolidación de los elementos en peligro de derrumbe y de los restos de la bóveda del canal.

El proyecto también incluye el ajardinamiento y la protección de la conducción mediante una cobertura y la presentación de la conducción, mausoleos y vía mediante un circuito ilustrado con una serie de paneles, donde se expliquen ss características y su relación con la ciudad.

El objetivo de la consolidación es actuar en una parte de la conducción entre el lago de Proserpina y el acueducto de los Milagros, ya que reúne una serie de elementos técnicos e históricos que explican el uso del agua dentro de la cultura romana.

Los trabajos se centrarán en la piscina limaria, el canal subterráneo y su conexión con la Vía de la Plata y los mausoleos que hay en los alrededores.

TORRE La piscina limaria era la primera torre de decantación que atravesaba el agua procedente de Proserpina y servia para que se depositaran los primeros limos. Existe otra piscina en la calle Calvario, que se consolidó hace unos años, además de una fuente monumental. Por este motivo es posible que se haga una excavación para comprobar si también en esta parte del acueducto había otra fuente.

Estos restos han convivido durante años con los vecinos de la zona, muchos de los cuales desconocen su origen.

El estado de conservación es bueno, a pesar de que acusa el paso del tiempo y de las acciones vandálicas. Así, además de una limpieza integral de la zona, consolidar los restos que quedan y acompañar los restos de una cartelería explicativa, se colocará una valla de respeto.

El proyecto incluye también las conducciones que se encuentran enfrente del cementerio y que se excavaron en 1998, y sembrar plantas que vayan marcando la parte subterránea para seguir en el paisaje el recorrido. Con todo ello se intentará dar una visión de cómo llegaba el agua a Mérida en la época romana y de que el acueducto no sólo son los arcos, sino también la conducción.