La situación es «insostenible». Trabajadores del centro sociosanitario Alfonso Díaz Ambrona denuncian que no disponen de agua caliente ni de toallas para los usuarios desde hace más de una semana, por lo que no descartan concentraciones de protesta si no se toman medidas. Ante estos hechos, desde la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales piden «disculpas» a los usuarios por «este incidente, en el cual «se ha trabajado desde el primer día por parte de la dirección del centro».

Una auxiliar de enfermería del centro sostiene que esta problemática se puso en conocimiento de los responsables del centro, sin que hasta la fecha se le haya dado una solución. «Tenemos que duchar a los pacientes con agua fría o usar barreños con pucheros de agua caliente», destaca la trabajadora de uno de los tres pabellones afectados. La consejería niega este extremo, al asegurar que los usuarios «en ningún momento se han duchado con agua fría», ya que se han ido turnando en los dos pabellones que sí tienen agua caliente.

A esto se suma que tampoco cuentan con toallas suficientes, por lo que tienen que usar sábanas para secar a los usuarios. «Esto no puede seguir así», recalca la sanitaria, quien asegura que el resto de sus compañeros están indignados y piden soluciones.

La consejería explica que el pasado día 28 se informó de la avería en la bomba de agua caliente y que ese mismo día se autorizó la reparación inmediata. La empresa de mantenimiento ya ha retirado la bomba y trasladó a Sanidad que ayer por la tarde estaría en disposición de volver a instalarla. El suministro de agua caliente sanitaria es central y da servicio a los pabellones, a excepción de dos módulos que ya cuentan con un servicio independiente y que a día de hoy tienen agua caliente.

Desde la consejería aseguran que «se va a independizar el servicio de agua caliente de cada módulo». Para ello, el 30 de julio se licitó la instalación de agua caliente sanitaria del centro, que se ha adjudicado a Avaqus Emérita S.L., por un importe de 124.790 euros más IVA, y el plazo de ejecución estimado es de seis meses. La actuación independizará los módulos funcionales, eliminando la instalación centralizada que está «en mal estado y solucionando así los problemas estructurales que afectan al centro».

Sobre las toallas, la consejería indica que ese mismo día 28 se montó un expediente por 41.000 euros de lencería que contempla la provisión de 500 toallas, baberos y empapadores. Mientras se sirve el material adquirido, se han llevado al centro toallas desde la gerencia del área de Mérida.