El Banco Regional de Sangre estudia dejar de realizar las extracciones en el ayuntamiento, que desarrolla el primer jueves de cada mes desde noviembre, si no mejoran los resultados obtenidos. Hasta el momento, la primera vez sacó 76 bolsas, 25 la segunda y 31 bolsas el pasado 8 de enero. El 5 de febrero volverán a hacerlo, pero "si siguen yendo las cosas mal, igual cambiamos la estrategia, no renunciando a sacar sangre en Mérida, pero haciendo campañas más llamativas", indicó el director del banco de sangre, José María Brull.

A su juicio, "la culpa" de que los emeritenses apenas se acerquen a donar sangre al ayuntamiento, "probablemente sea nuestra", al no saber llegar a los ciudadanos. Por ello, buscarán algo que "llame la atención a los medios de comunicación", por ejemplo, poner una pequeña carpa con música o con juegos malabares y payasos.

"No puede ser que en Plasencia saquemos ochenta bolsas todos los meses y aquí saquemos treinta", dijo Brull.

El pasado año se sacaron 592 bolsas en Mérida, lo que representa 11,6 donaciones por cada mil habitantes y año, cuando la media en Extremadura está en 41 donaciones anuales.