TEtste diario informó de la rueda de prensa que se celebró el pasado lunes para celebrar el II Foro Internacional de las Méridas del Mundo, con la presencia del director general de Comercio e Inversiones, Miguel Córdoba, apoyando entusiásticamente tal evento, que se celebrará la próxima semana. Lo que no podíamos imaginar nunca es que después de esta presentación a bombo y platillo con más de 60 empresarios de México, Venezuela, Perú y Chile y los asociados de AEME (empresarios de Mérida), con la ausencia de APYME (como representante de los empresarios emeritenses en la Cámara de Comercio, etcétera), no vaya a celebrarse la Feria de Turismo de Extremadura (Feturex).

Este evento debía celebrarse este año aquí después de haberlo hecho durante tres años consecutivos, con el esfuerzo económico de nuestros empresarios y no entendemos como las administraciones regional y municipal eluden el bulto, reconociendo implícitamente que se trata de "una de las vías de mejora de la situación de las empresas, para generar empleo y riqueza en la región".

¿Es que en Mérida estamos sobrados de industrias para menospreciar una ocasión tan importante, sabiendo además que el turismo es la fuente de riqueza más importante? ¿Cuál es la razón, para que nadie se haya pronunciado al respecto?

Se trata de avanzar en la internacionalización de las empresas extremeñas y fortalecer los lazos comerciales con Iberoamérica, un "mercado potencial" para las empresas extremeñas y emeritenses también; que dicho sea de paso, bien poco interés ha despertado la noticia en determinados medios de difusión regionales; pero esa es otra historia.

Y lo que tampoco vamos a poder entender es que siendo Mérida la impulsora principal de este evento comercial con los países iberoamericanos, sea en Badajoz ciudad, en donde se establezca la caja central de compras y el centro tecnológico de la comunidad que allí se asienta. Aquí todo el mundo calla y obedece.

¿Cuál va a ser la imagen que Mérida y nuestros empresarios de AEME van a dar a nuestros visitantes, después del recibimiento que siempre les dispensaron en aquel continente? Ni queriendo se puede hacer peor.