Ella es una mujer con carácter, en el buen sentido, luchadora e incansable. Hace unos años fue diagnosticada con cáncer (que ya no es sinónimo de muerte) y como a todos los que superan esta enfermedad le quedaron secuelas, aunque estas sean más o menos llevaderas. En su caso, de las que se ven, una traqueotomía que no le impide hablar y hacer su vida. Cuando pasaba por este proceso alguien se acercó a ayudar, un voluntario. Un gesto que le pareció de tanta importancia que decidió hacer lo mismo cuando se recuperara.
Así, la ahora vicepresidenta de la Asociación Oncológica Extremeña (Aoex) pide por una equiparación en servicios para los pacientes con cáncer y sus familiares, a otras comunidades autónomas. Es cierto que no hace falta irse a Houston para recibir el mejor tratamiento médico. El hospital de Mérida tiene oncólogos y especialistas como el doctor Cabanillas que son de los mejores que hay. Sin embargo, el cáncer no viene solo, a veces, es necesario atender psicológicamente a enfermos o a familiares o puede que necesiten la ayuda de un logopeda para volver a aprender a hablar, y así, un largo etcétera según cada caso.
La Asociación Oncológica Extremeña, gracias a sus socios y a acciones como la gala benéfica que tendrá lugar el próximo sábado 8 de junio, paga estos servicios para los pacientes extremeños y sus familias. Los psicooncólogos de la asociación también se ocupan de cuidados paliativos (para aquellos casos en los que ya sólo se puede mitigar el dolor) y recientemente han empezado a ofrecer atención a domicilio.
La asociación está presente en las ocho áreas de salud, entre ellas Mérida y tiene subdelegaciones en varias localidades más pequeñas como Calamonte, Guareña o Arroyo de San Serván. Tanto para conocer en qué les pueden ayudar como para comprar su entrada a esta Gala o participar con algún donativo, pueden entrar en www.aoex.es o llamar al 692 610 376. Y sobre todo recuerda que se puede salir y que no estás solo en esta lucha.
