El proyecto Barrio, desarrollado por el Ayuntamiento de Mérida, ha beneficiado desde 2008 a 1.200 vecinos de los barrios de San Lázaro, San Juan y Santa Isabel. Esta iniciativa comenzó con un estudio sociológico en el que se comprobó el nivel de formación y desempleo de los vecinos con el objetivo de convertirse en un instrumento mediador entre el individuo en riesgo de exclusión social y su entorno.

A partir de los resultados se han diseñado actuaciones encaminadas a mitigar las desigualdades, como la realización de cursos de formación no reglada dirigida a jóvenes, programas de acompañamiento en la inserción sociolaboral y actividades de sensibilización dirigidas a la ciudadanía general para derribar estereotipos que crean barreras.