Tibia respuesta de los hosteleros del centro a la idea de abrir temprano los domingos. La propuesta del delgado de Turismo, Angel Pelayo, no ha gustado mucho a los profesionales que han establecido su descanso el último día de la semana, que aseguran que ya tomaron esta determinación porque ante la ausencia de clientes ni siquiera podían cubrir costes. De hecho, la mayoría solo estarían dispuestos a replanteárselo en el caso de que como ha adelantado Pelayo a este diario, el ayuntamiento fomentara actividades alternativas para atraer a los vecinos y turistas a los establecimientos o se facilitara la instalación de veladores cubiertos, pero aún así en plena crisis ven muy complicado que la propuesta pueda llegar a buen puerto, sobre todo en los meses de invierno y una vez que entre en vigor la zona azul. La mayoría echa en falta más colaboración y apoyo del consistorio al sector.

"El centro ha bajado mucho. Los domingos cerramos porque no hay gente, gastábamos más que facturábamos y creo que va a ser muy difícil recuperar la plaza porque en los últimos años, desde el ayuntamiento se ha apostado por potenciar sobre todo la calle del Museo Romano y el Teatro", explica Ignacio Juez, encargado del bar La Dehesa de Santa María, ubicado en la Plaza de España. Juez cree que a menos que el consistorio presente un completo programa de actividades infantiles y de ocio que atraigan a los vecinos y turistas, será muy difícil que los bares del centro de la ciudad vuelvan a llenarse los domingos por la mañana, sobre todo en los meses de invierno y una vez que comience a aplicarse el estacionamiento regulado. "Hoy en día es un problema venir al centro a tomarse unas cañas o un café. Primero tienes que buscar aparcamiento y si encima llueve, ya para qué contar", apunta. "La gente quiere calle, más ahora con la ley antitabaco, pero aquí ni siquiera se pueden instalar veladores cubiertos como en José Ramón Mélida. Así, ¿cómo van a venir?", se pregunta.

De la misma opinión es Miguel Angel Valiente, propietario del Bar Arcade, también ubicado en la Plaza de España. "Aquí cerramos los domingos por la mañana de toda la vida porque nunca hay nadie. Abrimos por la tarde por el fútbol, pero solo si el Real Madrid o el Barcelona no han jugado el sábado", reconoce.

CRITICAS Al igual que el encargado de La Dehesa, Valiente se plantearía abrir los domingos solo si el ayuntamiento pusiera encima de la mesa "una buena propuesta, no solo dos altavoces con farolillos como hicieron en la pasada edición de la Feria de Septiembre". Valiente se ha mostrado muy crítico con el trato que los hosteleros del centro están recibiendo del ayuntamiento --junto al resto de propietarios, ha denunciado que la carpa instalada en la Plaza de España en Carnaval solo ha servido para fomentar la práctica del botellón y que los asistentes utilicen los bares cercanos como aseos públicos-- y se ha mostrado en contra de que el consistorio haga este tipo de propuestas cuando no acepta las sugerencias y peticiones del sector.

Marcos Rogerio, propietario del Bar Befeeater, tampoco abre los domingos por la mañana, pero estaría dispuesto a probar si se fomentaran actividades. "Antes abría y he tenido domingos en los que no ha venido nadie", asegura. Al igual que la mayoría de los negocios del centro, Rogerio reconoce que vive del gasto del personal funcionario de la Junta de Extremadura y abrir los fines de semana por la mañana solo para la clientela local no compensa, especialmente los domingos cuando ni siquiera se puede aprovechar el tirón del comercio. Pero aún así, no todos los bares del centro cierran el domingo por la mañana. Es el caso por ejemplo, de El Pestojero o la Cafetería Jijona, que aseguran que les renta porque el goteo no cesa y los pocos que salen van donde saben que está abierto.