UN NIÑO fue atropellado por un turismo en la tarde de ayer en una de las calles de la barriada de San Lázaro. Tras el golpe, fue necesaria la intervención de la policía local y del Cuerpo Nacional de Policía para impedir que el conductor fuera agredido por familiares y conocidos del pequeño.

El chico fue trasladado hasta el Hospital de Mérida para conocer el alcance de las lesiones que el golpe le podría haber producido. Por su parte, el conductor del vehículo se desplazó hasta las dependencias de la Guardia Civil para realizar la prueba de alcoholemia, ya que se produjo un fallo en el equipo de la policía local. El incidente se produjo en la confluencia de las calles Blanqueadores y Plasencia, en torno a las cinco y media de la tarde.