Tres días intensos, en los que la competición ha sido trepidante, la asistencia masiva y los valores esenciales. Estamos hablando de las II Olimpiadas Escolares Extremeñas, celebradas este pasado fin de semana en Don Benito, con la participación de más de 3.500 personas entre deportistas, entrenadores, representantes federativos y jueces y árbitros.

Satisfacción es la palabra más repetida tanto desde la Dirección General de Deportes del Gobierno de Extremadura, organizadora de esta convivencia, como desde el ayuntamiento dombenitense, responsable de las instalaciones y ciudad de acogida de los participantes.

Satisfacción por el buen funcionamiento de la Villa Olímpica, instalada en la Institución Ferial de Extremadura (Feval) en la que, además de descansar y realizarse las comidas grupales, se dinamizaron las horas libres de estos pequeños 'profesionales' del deporte, con actividades paralelas como sala de cine, la proyección en pantalla gigante de la final de Copa del Rey de fútbol entre Real Madrid y Atlético de Madrid, hinchables dinamizables, talleres de 'carrovelismo', boomerang y defensa personal o la exitosa zona tecnológica, con puestos de Wii Sport y Fórmula Online, que contaron con una afluencia masiva.

Satisfacción igualmente por el comportamiento de los deportistas, que dieron un magnífico ejemplo de compañerismo, esfuerzo, superación y respeto por el rival, haciendo valer más que nunca el 'Decálogo del deportista escolar', presentado por la Dirección General de Deportes durante la inauguración de estas Olimpiadas.

En el decálogo se recogen aspectos tan importantes como el derecho a elegir la modalidad deportiva que practicamos, a aprender compitiendo, en igualdad de condiciones y oportunidades o el derecho a no ser un campeón. Esta iniciativa nace dentro de la 'Escuela del Deporte', proyecto cuyo objetivo es que los valores inherentes a la práctica deportiva lleguen a todos y estén presentes en el deporte base de nuestra región.

Y por último, satisfacción por la gran afluencia de público a todas las competiciones y en todas las instalaciones, familiares de los participantes en su mayoría, pero aficionados al deporte en general también en gran número.

Si hacemos un repaso algo más pormenorizado de lo vivido durante estos tres días en la capital de las Vegas Altas, tendríamos que comenzar por hablar de la inauguración, celebrada en el salón de actos de Feval y que reunió a todos los deportistas y federaciones para presenciar el desfile de delegaciones y el encendido del pebetero olímpico. El encargado de dar por inaugurada esta segunda edición olímpica fue el director general de Deportes, Antonio Pedrera.

El sábado y el domingo, días de competición, se contó con pruebas en todos los recintos deportivos habilitados para el evento, comenzando por la Ciudad Deportiva de Don Benito, donde se concentraban el grueso de las modalidades: baloncesto, voley playa, pádel, tenis, atletismo, natación, rugby y fútbol, que se disputaron durante toda la jornada. Baloncesto, balonmano y fútbol sala también disputaron algunos de sus partidos en las pistas del CEIP Zurbarán.

Los pabellones de Feval fueron otro de los escenarios en los que se desarrollaron competiciones deportivas, acogiendo las finales de tenis de mesa, ajedrez o badminton, además de exhibiciones y jornadas de tecnificación de 'boccia', judo, kárate o patinaje.

Para el resto de modalidades la ubicación de sus pruebas estuvo más repartida, ya que sus características fueron las que indicaron el lugar de celebración. Así, las multitudinarias finales de ciclismo se disputaron en el Polígono Industrial 'Las Cumbres', donde se habilitaron varios circuitos, la Federación Extremeña de Orientación llevó a cabo sus actividades en la zona de Alange, las pruebas de Acuatlón tuvieron lugar en una finca cercana a Don Benito, al igual que las de hípica, y la competición de piragüismo se desarrolló en el río Guadiana a su paso por la vecina localidad de Medellín.

Una amplia participación, una gran afluencia de público, un éxito organizativo y la satisfacción general, que hacen que podamos hacer paralelismos con el deporte profesional y decir que estas han sido "las mejores Olimpiadas Escolares Extremeñas de la historia"... Eso sí, empatadas con las celebradas en Cáceres en 2012.