El Valle del Jerte es escenario cada año de un milagro: la floración de un millón de cerezos. Esa manifestación de la Naturaleza se convierte en Extremadura en un gran acontecimiento social, empresarial, turístico y vivencial que es mucho más que la alegría por la llegada de la primavera.

El Valle del Jerte rinde homenaje al árbol cuyo fruto es piedra angular de su economía, cristalizada no sólo en una gran variedad de cerezas, licores, aguardientes o mermeladas, sino en un constante fluir de viajeros procedentes de todo el mundo que quieren ver de cerca este acontecimiento espectacular.

El Valle del Jerte se ha convertido en el símbolo de una nueva forma de hacer turismo, sostenible, respetuosa con el medio ambiente, lejos del tradicional ´sol y playa´. Aquí, la floración de los cerezos es un espectáculo sensorial en el que participan todos los sentidos, principalmente la vista, el olfato y el gusto. Porque el viajero no se limita a quedarse extasiado ante un valle que parece nevado por la blancura de la flor de los cerezos, con su delicado olor. También hace parada y fonda en cualquiera de los once municipios que forman la comarca, donde a buen seguro disfrutará de una gastronomía que ha sorprendido desde tiempos inmemoriales a los amantes del buen yantar.

Además, la Fiesta del Cerezo en Flor que desde hace ya más de un cuarto de siglo se celebra, tiene desde 2010 el rango de Fiesta de Interés Turístico Nacional.

VIAJE AL CORAZON Llega el momento de preparar un viaje al corazón natural de la región. La floración de los cerezos es un excelente motivo, pero hay que saber que cualquier momento del año es apropiado para conocer el Valle del Jerte y recorrer sus municipios: Piornal, Cabezuela del Valle, Barrado, Cabrero, Casas del Castañar, Jerte, Navaconcejo, Rebollar, Tornavacas, El Torno y Valdastillas.

La floración de los cerezos se suele producir en la segunda quincena de marzo y primera semana de abril, aunque es la climatología la que manda en ese proceso natural. Los cerezos permanecen en flor durante diez días aproximadamente, con lo que se puede disfrutar del acontecimiento a lo largo de dos fines de semana.

El cultivo de las cerezas ha dado una gran fama a toda la comarca del ´Valle Cereza´ como también se le conoce. De hecho la palabra ´Jerte´ tiene origen árabe y significa "aguas cristalinas" o "valle angosto". Con ella se designa tanto al valle como al río que lo atraviesa. Los árabes ya conocían este cultivo y también hay una crónica de una comitiva del rey de Navarra, que en 1352 probó el exquisito y singular sabor de la cereza.

La excelencia de toda la comarca --en la que dejaron huella vetones, romanos, árabes y judíos-- está de manifiesto en que antes de su retiro a Yuste el propio Carlos V pasó por aquí y durmió en Tornavacas. Características del Valle son sus casas de adobe, travesaños y balconadas corridas. El Valle del Jerte se encuentra situado en el Noreste de Extremadura, 220 kilómetros al oeste de Madrid y cerca de Portugal. Aproximadamente su población se acerca a los 12.000 habitantes, aunque durante el verano se duplica con la llegada de turistas y emigrantes. La mayoría de la población vive de la agricultura, fundamentalmente de la cereza. La extensión del Valle del Jerte es de 372 kilómetros. Desde el año 1994 cuenta con 6.800 hectáreas declaradas como importante área natural bajo el reconocimiento de Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos.

Esta edición de la Fiesta del Cerezo en Flor arranca con un gran programa festivo en Piornal con actividades los días 25, 26 y 27 de marzo. Su alcalde, Angel Rama, asegura que la Fiesta del Cerezo en Flor significa un anticipo a la cosecha de la cereza en la comarca, cuyos principales ingresos proceden de este cultivo. Asegura que también estudian realizar una fiesta cuando la cosecha esté ya recogida. "La floración es un hecho único, aunque también queremos potenciar la otoñada. Estamos muy orgullosos de esta fiesta que tiene Interés Nacional", indica.

Cabezuela del Valle es el otro gran escenario de la celebración del Cerezo en Flor de este año. Desde la Oficina de Turismo de la Mancomunidad de Municipios Valle del Jerte situada en esa localidad partirá una ruta de senderismo que ha organizado el taller de empleo comarcal. Para Antonio Domínguez, alcalde de Cabezuela del Valle, "con el Interés Turístico Nacional mucha más gente visitará el Valle del Jerte. El Valle siempre ha estado contento con esta fiesta, porque son muchas personas las que vienen y todos salimos ganando: bares, casas rurales y apartamentos".

El Valle del Jerte es históricamente una de las primeras zonas productoras de cerezas de España con una producción media de 20 millones de kilos, lo que significa aproximadamente el 18% de la producción nacional, unos 115 millones de kilos. Con cerca de 4.000 familias viviendo de la agricultura, desde hace 15 años la actividad turística se ha convertido en una importante fuente de ingresos para muchos ciudadanos que se han animado a poner en marcha restaurantes, alojamientos rurales, o empresas de actividades complementarias como el senderismo o rutas en quads.

Para contemplar la floración en todo su esplendor hay que hacer un recorrido por los pueblos que conforman el valle. Así, en coche, puede hacerse una ruta circular por la sierra con paradas en Valdastillas, Piornal, Barrado, Cabrero, Casas del Castañar, El Torno y Rebollar.

También hay una ruta paralela al río Jerte siguiendo la N-110 pasado por Navaconcejo, Cabezuela del Valle, Jerte, Tornavacas y el Puerto de Tornavacas. Estos días puede utilizarse el automóvil, pero no deberíamos perdernos el placer que supone la aventura de conocer la zona a pie, recorriendo sus pueblos y conociendo los rincones que esconde la sierra.

Serranías, gargantas y antiguos caminos que unían el Valle del Jerte con la Vera, nos enseñan recorridos en los que puede adentrarse el senderista. Precisamente, la localidad más al norte del Valle del Jerte, Tornavacas, es donde el emperador Carlos V descansó en 1556 antes de continuar su recorrido hacia el Castillo de los Condes de Oropesa en Jarandilla de la Vera.

También se inicia en el Valle del Jerte el paso hacia el Valle del Ambroz, a través del histórico Puerto de Honduras.