INGLATERRA: James, Johnson, Carragher, Terry, Cole, Lennon (Wright-Philipps, m.63), Gerrard, Lampard, Barry (Crouch, m.84), Rooney y Heskey (Defoe, m.74).

ARGELIA: Mbolhi, Kadir, Bougherra, Belhadj, Yahia, Halliche, Yebda (Mesbah, m.89), Lacen, Boudebouz (Abdoun m.74), Matmour y Ziani (Guedioura, m.80).

ARBITRO: Ravshan Irmatov (Uzbekistán). Amonestó por Inglaterra a Carragher y por Argelia a Lacen.

INCIDENCIAS: Partido de la segunda jornada del grupo C disputado sobre un terreno de juego en buenas condiciones.

Ni en el día de su 64 cumpleaños se permitió una alegría Fabio Capello. Tampoco se la dieron sus jugadores, que realizaron un encuentro infumable ante una voluntariosa Argelia. Ninguna de las figuras inglesas acudió al rescate de un conjunto vulgar, encorsetado en un fútbol ramplón y e incapaz de terminar las jugadas. Ahora toca jugársela ante Eslovenia, que lidera el Grupo C con cuatro puntos.

Fiel a su estilo, Capello ofreció otra versión del antifútbol. El segundo empate de Inglaterra en el Mundial también lleva el sello del técnico italiano, que parece incapaz de sacar partido de jugadores como Lampard, Gerrard o el mismísimo Rooney. Nada pudo rescatar la propuesta ramplona del italiano. Ni siquiera la presencia de Mbolhi, el tercer portero de Argelia, que ocupó el lugar de Chaouchi, el meta titular que regaló el gol a Eslovenia en el primer encuentro. En la otra portería, James también desbancó a Green por su tremendo agujero ante Estados Unidos y demostró sus goteras en un despeje de puños.

Lejos de probar al portero de Argelia, que en cinco minutos demostró sus carencias en un balón por alto y un despeje con el pie a un contrario, Inglaterra comenzó a perderse entre el bosque de piernas de su rival. Su dominio apenas le permitía llegar de mala manera al área rival, donde morían todas sus acciones. Ni la presencia de Barry por delante de la defensa, que supuestamente iba a liberar a Lampard y Gerrard sirvió para algo más que para firmar una primera mitad infame en la que el primer disparo a portería se produjo a la media hora, obra de Gerrard.

La segunda mitad fue más de lo mismo. Lejos de aumentar las revoluciones, el equipo de Capello seguía deambulando por el campo ante un rival aguerrido atrás. Un error de Terry pudo costarle el puntito a Inglaterra, pero James estuvo atento (m. 63). Luego Heskey eligió el centro en lugar de tirar en una buena posición (m. 70). Una acción que llevó al público inglés a silbar a su pobre selección.