Milagrosa Carrero es uno de esas clandestinas, toda una profesora de Secundaria, como le gusta presentarse en sus sueltos, comentándonos sus alucinaciones así como sorprendiéndonos con una de socialistas . ¿Nos engaña con su verdadera profesión o se dedica a hacer méritos de cara a las próximas elecciones? O, quizás, debamos dar un paso más, ¿Es una asalariada clandestina del PSOE?

El asunto resulta dudoso. Sea como sea, si la señora Carrero es una clandestina del grupo municipal socialista de Cáceres, al servicio de Carmen Heras , ciertamente se está ganando la denominación a pulso. Las aportaciones tan sobrecogedoras que nos presenta la digna profesora, son pinitos de indudable valor ideológico para recibir los soplos de la sutil dedocracia presente en la Administración regional que nuestro padre Ibarra tan bien controla.

Y aunque, esta consumada piloto de la Marina Mercante, se dedica a criticar sin fundamento ni argumento, yo haré mis reflexiones críticas. Debemos ser más objetivos y rigurosos y, sobre todo, evitar afirmaciones no contrastadas con la realidad, porque eso es mentir, señora profesora. Actuar con tanto radicalismo hacia las personas y las circunstancias que nos rodean no es ni ético ni políticamente correcto. Todo no vale. Y un analista de la realidad política, como es usted, debería saberlo. El problema es que olvida el conjunto de la realidad y se decanta descarada y clandestinamente hacia un solo lado, el de la izquierda, olvidando que el resto también existe, indudablemente a su pesar.

Como todos tenemos derecho a opinar, para informar y contrastar pareceres que es lo que evita la desinformación y la manipulación, tengo que decirle que yo no aprecio que exista descalabro y desgobierno en el Ayuntamiento de Cáceres, y si usted lo afirma, debería demostrarlo, al igual que las referencias que hace, tan a menudo, sobre los escándalos e irregularidades. Tal vez los confunda con los de la Junta y el PSOE, como son los relacionados con las oposiciones, vallas publicitarias, contratos sanitarios, etcétera- Pienso que las personas que decidieron trabajar por los ciudadanos desde una opción política en el ayuntamiento merecen respeto.

En cuanto a sus dotes adivinatorias sobre quién ganará las próximas elecciones, me resulta muy difícil debatir, porque yo no poseo esa cualidad, pero sí opino que en Cáceres resulta muy difícil no valorar ni apoyar la labor realizada durante doce años por el alcalde José María Saponi , porque su trabajo, honradez y dignidad están demostrados por las realidades y los hechos.

Sobre la economía, los datos objetivos presentados, que mientras no se demuestre lo contrario son los reales, al margen de los debates e interpretaciones políticas, no son malos, pues, después de todo lo hecho en la ciudad, la deuda actual es inferior a la dejada por sus compañeros socialistas en 1995. No se puede pedir sólo para Cáceres milagros financieros. ¿O hablamos de la deuda de la Junta?

Tampoco coincido en sus apreciaciones personales sobre nuestro alcalde, porque tal y como están las cosas, nadie posee el aval de trabajo, el interés, la entrega, el amor por su ciudad y conocimiento de Cáceres como José María Saponi, y eso muy a su pesar, creo y estoy convencido de que esto y mucho más es lo que conducirá al Partido Popular hacia una nueva victoria electoral en mayo de 2007, porque los cacereños valoramos la transformación positiva que se ha producido en esta ciudad, queremos seguir avanzando y no queremos experimentos con aventureros y redentoristas de salón. Atentamente un compañero.

*Secretario provincial del PPen medios de comunicación