Cartas al director

Que Extremadura atesora un atraso proverbial respecto a otras comunidades en el terreno sanitario es una realidad palpable tanto leyendo las cartas al director de los rotativos como en la experiencia directa cuando tienes que visitar un centro de salud. ¿cómo es posible que la Consejería de Sanidad no envíe ATS o enfermeros para vacunar de la gripe al personal de riesgo, como profesores y maestros? ¿Cuántas horas pueden perderse por convalecencia por no hacer los deberes? He sido funcionario en el siglo pasado de la Comunidad Floral de Navarra y allí iban religiosamente todos los cursos a vacunar a los profesores que lo solicitaban. En nuestra comunidad se limitan a enviar vía circular un escrito en el que se nos distingue con la gratuidad de la vacuna y con ese gesto creen que ya han hecho bastante. Misión cumplida.

Pues bien, como todos los años voy a vacunarme al centro de salud de Jaraíz de la Vera, y allí el caos, el desorden, la entropía y la desinformación campan a sus anchas. Hay una consulta pero la puerta está cerrada y para colmo hay un letrero que reza: "Cierren la puerta al salir". Pero para poder cerrarla antes hay que abrirla ¿o me equivoco?

Asimismo he de reconocer que el trato con que me regaló el ATS fue todo menos profesional. Debía tener tantas cosas que hacer que no encontraba el momento para mandarme a la mierda y seguir con sus ocupaciones, pero al final lo consiguió y me mandó a paseo, no sin antes demostrar que mi presencia allí era non grata utilizando para ello todo su arsenal: somnolencia, sopor y cara de que me deben y no me pagan, con el argumento que él no sabe nada de vacunas. Hay personas que una bata le viene grande. Con estas vivencias es difícil que nos hagan creer que disfrutamos de un sistema sanitario óptimo, universal, gratuito y demás auto bombo; la realidad es bien otra.

No estaría de más que la consejería impartiera cursos a sus subordinados para que aprendieran un poco de educación y a atender a los pacientes como personas y no como a escoria o ganado que no van sino a darles la castaña.

*Juan C. López Santiago

Los derechos de los niños

El 20 de noviembre de 1959 se aprobó la Declaración de los Derechos del Niño, y la Convención sobre los Derechos del Niño en 1989. Por ello, todos los 20 de noviembre desde la fecha se conmemora el Día Mundial de los niños, y no de otra cosa. Es un día feliz.

El 20 de noviembre se recuerda a todos aquellos niños que por diversos motivos, son explotados trabajando largas jornadas laborales cuando deberían estar jugando con aquello que fabrican. Niños que no tienen acceso a la educación, a jugar, a desarrollarse en la infancia, a sonreír, a que sus padres no les lleven de la mano ante depravados del turismo sexual infantil. Niños que están a la venta, niños sin una luz en la cara, niños que no entienden qué les hacen, pero su mirada revela sus sentimientos. Niños que mueren de hambre, niños huérfanos y contagiados por el VIH/SIDA transmitido por sus padres, niños que se ven obligados a emigrar para conseguir alimento para sus familias. En definitiva niños.

¿Se sostendría el mundo sin estos niños? Es una gran reflexión. La existencia de la globalización, de los recursos que consumimos diariamente los países desarrollados, tener explotados a estos niños trabajando para nuestras ropas y calzados de marcas mundialmente conocidas que nos cobran más de un 150% del valor total de su producción. ¿De verdad somos conscientes de nuestro mundo?

Es el funcionamiento de los países desarrollados, ser ricos viviendo de los pobres, y no es una utopía. No tenemos el valor suficiente para jactarnos de gritar en contra de la pobreza, de reclamar el 0,7 y de intentar conseguir un mundo más justo e igualitario. Cada uno de nosotros somos responsable de estas desgracias en este planeta. Tú y yo vivimos de ellos, de estos niños.

¿Cambiaremos algún día?

*David Santos Holguín

Nuevo Bachillerato para maquillar

Con relación al nuevo bachillerato, a plazos, cabe tener en cuenta que en el plano estrictamente académico, la posibilidad de crear en Bachillerato un híbrido con materias de primero y segundo es una manera de desincentivar a los alumnos para que hagan lo que tienen que hacer, que es aprobar todas o el mayor número de asignaturas por curso --hasta el límite de dos suspendidas--, pues de antemano cuentan con la seguridad de que ni con cuatro suspensos se verán obligados a repetirlo y, además, podrán matricularse en asignaturas de segundo curso. Este planteamiento reincide en un modelo muy lesivo para la formación de los jóvenes, porque no inculca en ellos un elemental sentido de la responsabilidad académica, no retribuye el esfuerzo en el estudio y, en cambio, bonifica a los que directamente opten por hacer el Bachillerato en cuatro años y no en dos. No hay argumentos de peso para afirmar que con está fórmula --el fraccionamiento del Bachillerato-- el fracaso académico se vaya a transformar en éxito. Simplemente, tardará más tiempo en reflejarse en las cifras oficiales porque ampliará el plazo del abandono escolar. Es decir, el problema no se soluciona, pero se maquilla.

*Jesús D. Mez Madrid

Fe de errores

En las páginas de Extremayor de ayer, en el pie de foto de la empresa Arco Iris, apareció como directivo de la empresa el alcalde de Guadalupe, cuando en realidad estaba circunstancialmente en el estand.