Cartas al director

No quiero ser mal pensado, pero todos los que esperamos para trabajar en Administración a través de sus listas, emanadas de una oposición, nos sentimos preocupados y alarmados del oscurantismo que hay en su gestión. Sólo podemos conocer nuestra posición, insertando nuestro DNI, y no podemos informarnos en ningún sitio, ni físico ni en internet, de quiénes son el resto de los integrantes, qué zonas han solicitado, qué destino se les ha adjudicado, qué vacantes o sustituciones quedan por ofertar. En fin, que es la casa de tócame Roque . Si a ello unimos la ilegalidad que se produce, a favor de muchos interinos, no ofertando sus plazas ni a concurso de traslados ni a oposiciones, difícil lo tenemos aquellos que aprobamos la oposición (aunque sin plaza) para trabajar con una interinidad el día de mañana si dichas plazas siguen ocupadas ilegalmente por interinos históricos que no aprueban, sin que, ¡oh casualidad!, algunos jefes de servicio nunca saquen sus plazas a concurso (para ser ocupadas por funcionarios) y nunca se ofertan, como dice la ley, tras cada oposición a los integrantes aprobados sin plaza de las únicas listas vigentes que se constituyen tras cada proceso de oposiciones, consintiendo la Dirección General de la Función Pública este oscurantismo en la gestión y selección de plazas intocables.

Quiero trabajar de interino y quiero que mis derechos sean salvaguardados por la administración, que dejen de manipular la relación de puestos de trabajo para salvar a interinos que no aprueban y a los que se mantiene milagrosamente año tras año en cambiantes puestos de trabajo, impidiéndonos trabajar a los que tenemos derecho por haber superado el último proceso de oposiciones.

*Ignacio Seco de Villarroel (Correo electrónico)

Que la tierra te sea leve

Los Reyes Magos pasaron tarde ese año, te trajeron en septiembre. En seguida nos cautivaste y nos arrancaste sonrisas y preocupaciones, al igual que ahora se han llenado nuestros ojos de lágrimas. A pesar de tu forma de ser, nos sedujiste y enamoraste. ¡Eras la reina de la casas!

El oceánico azul de tus ojos transmitía tu libertad. Te has ido igual que llegaste, sin avisar, Zeus nos robó tus 6 vidas restantes para incorporarte a su olimpo.

Gracias por todo, Grecia, Mama, Juanje, Tere y el Chico te deseamos lo mejor en este viaje y que la tierra te sea leve

*J. Antonio P. Pérez (Correo electrónico)

Pena de plenoo pleno de pena

Desde que el pasado diciembre, que un partido político independiente (AIVA) hábilmente manejado desde la sombra por una mano negra que, afortunadamente, todos vamos conociendo y el PP de Valencia de Alcántara, promovieran una moción de censura para desbancar al partido más votado de la alcaldía (PSOE), no había asistido a un pleno del ayuntamiento. Creo que seguiré sin ir.

No merece la pena perder más tiempo ni crearme malestar por semejante pantomima.

El tándem formado por PP-AIVA solo tiene una meta: impedir a toda costa que el PSOE haga la más mínima expresión de oposición al que --recuerdo-- condenaron con una más que criticable moción de censura. Este tándem se marca de antemano una línea y de ahí no se sale, la oposición no cuenta, aburre, se la ignora, se la ningunea, se la avergüenza y critica, en fin, una auténtica cacicada. ¡La dictadura ha vuelto!

Hay que reconocerle a este dúo cómico-teatral que sabe rodearse de un público acorde con su espectáculo, que le aplaude cuando debe e interrumpe o incluso aconseja o manda cuando quiere, a su libre albedrío, mientras que la oposición está condenada a hacerse oír a voces o imponiéndose, incluso aquellos miembros de reconocido talante demasiado tranquilo.

Para colmo, viene el portavoz del PP a darnos una lección de cómo se trepa en política: haciendo mociones vacías al dictado de Génova, sujetando el brazo de quien debe controlar la situación, imponiéndose cuando quiere por encima de él, mirándose con complicidad con el señor de AIVA, ninguneando en todo momento a quien debe ser su superior, etcétera. Este señor se está haciendo un hueco con el manual de la más exquisita derecha que sigue empotrada en nuestra sociedad.

El día que estos señores decidieron gobernarnos no pensaron en gobernar, sino en que no gobernaran otros y eso se les nota demasiado. No hay más que asistir a un pleno. Desde aquí pido a mis paisanos que vayan aunque solo sea a uno y comprueben en qué hemos convertido nuestro ayuntamiento y por tanto a nuestro pueblo, y así, cuando toque, obren en consecuencia, porque no me cabe duda que estos señores lo pagarán donde deben: en las urnas.

*José Picado (Correo electrónico)