El pasado fin de semana, Pablo Alborán reservó la totalidad de las habitaciones del Hotel Adealba de Mérida. Disfrutó de una sesión en el SPA, solicitó el servicio de cochera privada dentro del hotel para entrar y salir en coche ya después de la actuación y organizó junto a los amigos y familiares que le acompañaban una exclusiva fiesta privada en el patio interior del hotel hasta bien entrada la madrugada, donde en un ambiente íntimo y confortable, interpretó algunos de sus temas.