De entrada no soy fumador. De entrada no tengo bar ni vinculación con el sector. De entrada no me desagrada que al entrar en un bar no vea humo. De entrada no me parece mal llegar a casa y no tener que meter la ropa en la lavadora por su olor. De entrada no me parece bien ver a muchos fumadores en la calle tapados hasta las orejas por el frío. De entrada no me parece del todo muy ético que se prohíba fumar en los bares y en cambio se permita la venta de tabaco. De entrada no me parece correcto que muchos hosteleros que tuvieron que realizar obras para habilitar zonas de fumadores o no fumadores, ahora tengan que volver a gastarse el dinero en artefactos contaminantes para poder seguir manteniendo sus clientes y su negocio. De entrada no me parece bien que conviertan a empresarios y empleados de hostelería en agentes sin remunerar para que los demás cumplan una ley. De entrada no creo muy constitucional permitir que cualquier ciudadano decida libremente si en su negocio o en su casa, se fume o no, si está indicado de manera adecuada ya que los demás tenemos y siempre hemos tenido la libertad o no, de entrar o no, en ese local. De entrada no creo que a nadie se le obliga a entrar en un negocio de ocio u hostelería, por tanto si todo lo llevamos al término lugar o establecimiento público, prohíban entonces fumar del todo, prohiban fumar en las calles, prohíban la venta de tabaco, clausuren y prohiban los estancos, prohíban su plantación, prohíban su importación y prohíban todo lo asociado al tabaco. De entrada no me parece bien que se prohíba fumar en los parques por los niños y en cambio se siga permitiendo la emisión en televisión de programas con alto contenido violento todas las tardes. De entrada creo necesario prohibido prohibir y más bien creo conveniente educar y respetar.

Pepe Casado **

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