TTtras el verano los expertos contraatacan. Algunas revelaciones inquietantes: "El trasplante fecal adelgaza". Con el experimento en mantillas, de momento se introduce en el intestino de inocentes ratitas heces de dos mujeres. Una gorda y otra flaca. Las que recibieron las de la obesa se pusieron como bolas. Pero las que luego comieron las caquitas de sus compis delgadas, estilizaron mogollón. ¿Lo encuentran asqueroso? Es simplemente ciencia.

La otra revelación postvacacional consiste en una obviedad: Los hombres españoles crecieron de media doce centímetros en cien años. No hace falta remontarse tan lejos. Actualmente en casi todas las familias españolas los niños son más altos que sus padres. Como muestra emblemática el príncipe, alto entre los altos, y eso que su padre ya era de los espigados.

Mas ese trabajo de investigación empírica nada dice de las mujeres españolas. Y eso molesta. Al menos a mí que soy de las menudas. Molaría que las féminas hispanas progresaran también. Y me invade una sospecha fatal ¿Seguiremos siendo de las más bajitas de Europa? Luego sacudo el desánimo. ¿Qué importa semejante nimiedad si lo que prima es el intelecto, la capacidad de superación y adaptación, la incorporación a la cosa pública, el alcanzar la cota de poder que por derecho nos corresponde? Porque mujeres poderosas las tenemos de todas las estaturas. Algunas refrendan su buen hacer en la política nacional y otras se encumbran a lo más encumbrado por ejemplo en Andalucía.

Otras, antaño eximias representantes zapateriles, optan no por la huida, sino por lo que la Cospedal llamó "movilidad exterior". Ahí están Aído , Pajín y ahora Chacón . Nada que oponer. Hacen muy requetebién en pasear su españolidad por el mundo y recibir por ello los emolumentos más sustanciosos que puedan. Miren si no a otra mujer de mucha altura. La infanta Cristina. Real modelo de nueva española por el mundo. Delgada sin trasplantes fecales y con lo que han crecido los Borbones, va a ganar en total 600.000 euros de nada al año. Para que las españolas en España vayamos aprendiendo.