Tras las denuncias contra Harvey Weinstein por abusos sexuales (y no han sido cuatro ni seis, sino decenas) han empezado a aparecer denuncias por lo mismo no solo en Hollywood sino en todas partes, mayormente contra famosos o famosillos del mundo del cine, a través de la campaña #Metoo («Yo también», es decir, «yo también fui o he sido víctima de abusos»). Nada que objetar, desde luego, salvo que son denuncias que parecen llegar demasiado tarde (algunas datan de hace 30 años) y al lugar equivocado, pues los delitos se denuncian donde corresponde, no en escenarios o entrevistas..., es decir, no sirviéndose de la popularidad.

Por supuesto, nadie niega esos abusos, pero las denuncias, quizá por tardías, quizá por su número, quizá por su sucesión (¿el efecto contagio, como dicen que ocurre con los suicidios?), han sido denunciadas a su vez por un centenar de mujeres francesas que consideran que la campaña #Metoo es puritanismo sexual. Así, cinco escritoras francesas reconocidas, cinco intelectuales reputadas (alguien dirá que más bien reputas, qué le vamos a hacer), han escrito al respecto un manifiesto atrozmente adulto, no apto para menores (y hay menores de todas las edades), para saber de qué se habla cuando se habla de la libertad (no solo sexual) de la mujer.

Esta protesta, por ejemplo: «Es propio del puritanismo utilizar argumentos de protección y emancipación de la mujer para atarnos mejor a un estatus de víctimas eternas». (¿Y qué puritanismo se erige en protector y emancipador de la mujer?) O este alegato: «Una mujer puede, en el mismo día, dirigir un equipo profesional y disfrutar siendo el objeto sexual de un hombre, sin ser por eso una zorra o una cómplice del patriarcado». (Es decir, el derecho de la mujer a ser mujer y a ser objeto sexual.) Y este corolario, que no es solo propio de la mujer: «Nuestra libertad es inviolable (...) y no está exenta de riesgos y responsabilidades».

En fin, no es que las firmantes del manifiesto nieguen los abusos, pero es revelador, moralmente revelador, este centenar de mujeres que se rebela contra una campaña de denuncias que considera puritana.