TYto no sé a ustedes pero a mí que un chico casi desconocido que acaba de lanzar un par de discos, se ha hecho la permanente, y canta como entallado por los cataplines, diga que está viviendo en su casa de Miami, me intriga mucho. Que lo diga Julio Iglesias , vale, pero que novicios, cantantes de rancheras, folclóricas y tal, que en España no consiguen que vayan a sus conciertos ni los familiares, triunfen en Miami, tengan casa en Miami y Miami sea la repera para ellos, me sigue intrigando.

¿Qué pasa en Miami? Me imagino un sitio en el que la gente, la ciudadanía, no tiene otra cosa que hacer que estar todo el día de concierto en concierto: "Oye, espabila cariño que a las once de la mañana canta la de las rancheras, luego a las dos y cuarto viene el Bertín , a las siete de la tarde Manolo Otero (que ya me dirán) y a las diez y media, Julio . Que se nos acumula el trabajo". Y luego lo de las casas. Todos tienen una casa con jardín y lago. Raphael , una mansión, Rocío (cualquiera de las dos) otra con mayordomos que se saben vida y aventuras, Bertín, Pedrito Rico (no sé si sigue), Dyango ... ¿Qué pasa con las casas de Miami, que son todas del Plan Trujillo? Porque si no, no se entiende. Aquí ganarse una casa (y no digamos una carrera musical) vale un huevo pero en Miami llegas, pegas tres jipíos, y ¡hale! éxito de público, éxito de crítica y casa. Pronto veremos a Bebe (no creo que su inteligencia se lo permita) o a Elena Grajera (me parece que esta señora no canta rancheras y los suyo tiene una calidad diferente a lo que se estila en Miami) pero deberían ir. Por lo menos por lo de las casas que luego se venden a buen precio a los niños con permanente y jipíos.

*Dramaturgo y directordel consorcio López de Ayala