Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua, en su primera acepción, la definición de palabra sería: "(Del lat. parabola).1. f. Segmento del discurso unificado habitualmente por el acento, el significado y pausas potenciales inicial y final". Pero las palabras son algo más, con palabras podríamos llenar una vida, pues podemos pedir, conceder, tener, retirar o hacer uso de ella. Podemos no entender ni palabra, dar nuestra palabra, decir palabras gruesas, palabras mágicas a los niños, palabras preñadas ocultando dobles sentidos, podemos escuchar la palabra de Dios, lanzar palabras al aire o entretenernos con las palabras cruzadas de los crucigramas. Hay palabras de duelo, palabras deshonestas, palabras mayores, últimas palabras o también podemos quedarnos con las palabras a medias o con la palabra en la boca. Podemos tomar la palabra, omitirla o conceder el uso de ella en un debate a alguien, podemos darla, dirigirla o empeñarla, ser esclavos de ellas, parcos en las mismas o con cuatro palabras expresar sentimientos o ideas; se nos pueden escapar y aunque no debiésemos, también se puede faltar a ellas y si no sabemos de algo mejor será callar no sea que no soltemos más que palabras y nadie entienda ni media de ellas. Hay que ser educados y pedir siempre la palabra y no pisárnoslas los unos a los otros. Para acabar, os doy mi palabra de honor que nuca pensé poder explicar esto en tan pocas palabras.

Ricardo Hernández Martín **

Cáceres