El célebre arquitecto angloitaliano Richard George Rogers (Florencia, 1933), creador junto a Renzo Piano del Centro Pompidou de París (1977), no para de trabajar en los más variopintos países y con proyectos que continúan generando admiración, para unos, y el más absoluto rechazo, para otros. El principal proyecto que acomete ahora en España es en la barcelonesa Viladecans, para convertir todo un barrio en un gran Parque de Negocios.

Además de lo de Viladecans, Rogers también tiene entre manos la construcción de un rascacielos en Hospitalet y la reforma de la plaza de toros de Las Arenas.

Desde sus inicios, Rogers ha optado por una arquitectura funcional, en la que la tecnología punta (high-tech ) juega un papel preponderante.

El Centro Pompidou lo concibió así: "Un edificio vuelto del revés, con la estructura y los servicios por fuera (tuberías y sistemas de ventilación coloreados destacan en la fachada), para dejar los espacios interiores diáfanos y flexibles". Fue tal el desconcierto causado en un primer momento que Rogers y su socio Piano se separaron por falta de trabajo.

No obstante, a raíz de su edificio de Lloyds en Londres (1984), a lord Rogers se lo han rifado en todas partes. En su país ha asesorado a Blair y en España a alcaldes como Maragall.