Desde que en 1977 tomara posesión como delegado provincial de Educación, lo que le valió pasar al primer plano de la actualidad local en unos momentos de profundos cambios sociales, Teófilo González Porras (Navalmoral de la Mata, 1947) ha esculpido con sus buenas dotes de sensatez y compromiso el prototipo de hombre público cacereño.

Amante de las letras y la historia, buen conocedor de las relaciones institucionales, su alto grado de la responsabilidad le ha llevado a ´mojarse´ siempre en todo lo que considera un beneficio común.

Hombre de centro, inició su andadura política en el CDS y desde 1987 a 1991 ocupó una concejalía en Cáceres. En la siguiente legislatura entró en las filas socialistas ocupándose de la delegación de Cultura. Durante quince años ocupó el cargo de director del instituto cacereño de El Brocense, la institución educativa más antigua de la región y la única poseedora de la Medalla de Extremadura. Fue presidente de la Cruz Roja de Cáceres y, en la actualidad, ostenta una concejalía en su Navalmoral natal, como independiente pero bajo las siglas del PSOE.

Recientemente se encargó de la dirección técnica del Congreso de las Ciudades Europeas, una cita que puso a Cáceres en el punto de partida hacia la capitalidad cultural, un objetivo que se presenta difícil pero al que, a buen seguro, Teófilo González tendrá mucho que aportar.