Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), los votantes de Vox son mayoritariamente hombres (con razón se dice que la mujer es más inteligente). Pero no cualquier hombre, sino hombres jóvenes (la media de edad, 44 años). Y no cualquier hombre joven, sino hombres jóvenes adinerados (¡solo faltaría que los hombres jóvenes pobres...!). Y no cualquier hombre joven adinerado, sino hombres jóvenes adinerados y con estudios (hay colegios, y por supuesto universidades, que dan títulos únicamente a quienes pueden pagárselos). Y no cualquier hombre joven adinerado y con estudios, sino hombres jóvenes, adinerados, con estudios y, oh sorpresa, muy de derechas.

Esto último, lo de «muy de derechas», el CIS podría habérselo ahorrado. Para votar a Vox, más allá de tener estudios, de tener dinero, de ser joven y de ser hombre, basta con ser muy de derechas. Sobre todo eso, ser muy de derechas. Todo lo demás está de más. ¿Acaso votan a Vox todos los hombres que son jóvenes, todos los hombres que son jóvenes adinerados, todos los hombres que son jóvenes adinerados y --por no romper la cadena-- todos los hombres que son jóvenes adinerados y con estudios? En absoluto. Vox quizá no consiga el voto de muchas mujeres, dado su desprecio al feminismo e incluso a lo femenino, pero sí el voto de hombres --y de mujeres, qué carajo-- que carecen de juventud, dinero y estudios. Como queda dicho, para votar a Vox basta únicamente con ser muy de derechas.

Y es obvio que Vox --y esto no lo recoge el estudio del CIS-- sabe cómo captar al votante que si no es muy de derechas, acabará siéndolo. Ahí están los taurinos y los cazadores, por ejemplo, a quienes Vox defiende. Ahí están también los católicos, que creen en Vox por su desinhibición a la hora y en la hora de declarar los valores de la fe. Ahí están asimismo quienes reivindican la patria y la unidad de España. Ahí están los que niegan el cambio climático, que no es sino un «camelo», según Vox. Ahí están los homófonos, los xenófobos, los islamófonos... En fin, que votantes no le van a faltar. Serán los que todavía no habían descubierto que son muy derechas.