Actualmente, en España, por cada euro que gana un hombre, una mujer gana 0,84 céntimos. Durante los años cincuenta y sesenta, razones como la menor educación de la mujer y la legalidad de la discriminación eran las causas de la diferencia salarial.

Gracias a las reivindicaciones, todas estas causas desaparecieron, excepto una: la mujer debe cuidar a los hijos. Diferentes estudios han demostrado que la diferencia salarial no depende de si eres mujer u hombre, sino de si eres una mujer con hijos o no.

Los hombres siguen trabajando a jornada completa; en cambio, la mujer necesita tiempo para estar en casa. Y cuidarlos. Es por este motivo que hasta que no haya un cambio en la visión del cuidado de los hijos, no habrá un cambio en esta diferencia.

Países como Islandia y Ruanda lo han conseguido. ¿Por qué nosotros no?