A los infartos y deficiencias respiratorias se suman en fines de semana y días festivos los accidentes de tráfico y las borracheras juveniles entre las emergencias más frecuentes que atiende el servicio 112 en Plasencia, según el equipo que forman cinco médicos, cinco enfermeros y cinco técnicos en transporte sanitario. Son los Angeles del 112 que se han hecho populares en nuestras calles desde el mes de marzo del año 2000.
Siempre van de cuatro en cuatro en guardias de 24 horas con su inseparable teléfono de urgencias. Cuando la policía recibe una llamada de emergencia, automáticamente avisa al Centro Coordinador de Mérida que decide si tiene que actuar el servicio del 112. Por eso no se separan nunca, pero también porque la sede del servicio ocupa apenas cuarenta metros cuadrados en un bajo de un bloque de viviendas mientras en Cáceres o Badajoz se hallan en edificios próximos o anexos a los centros hospitalarios. Su mejor regalo de Reyes, a primera vista, unas mejores dependencias.
