Los vecinos de la calle Jacinto Benavente calculan que llevan un mes con un acerado levantado y las alcantarillas abiertas que son fruto de la obra de reparación de una avería de agua. No entienden por qué después de tanto tiempo, el acerado continúa así y se quejan de que "por las alcantarillas salen ratas, ayer mismo había una en el portal y además salen malos olores".

Lo dice una vecina de 61 años, recién operada de la rodilla y que tiene que andar con muletas. "Yo ahora cada vez que salgo a la calle voy en estado de nervios por si me resbalo o me caigo o esto se hunde y tengo que cruzar a la acera de enfrente para sentarme en un banco. Yo no tengo necesidad de estar así, esto es una vergüenza".

Además, en su caso, el estado de la acera le impide ya tender la ropa. "Yo vivo en el bajo y desde dentro de casa no llego al tendedero así que salía y tendía desde la acera, pero ahora me da miedo y mi marido es minusválido y tiene una moto que no puede sacar del garaje".

Sus vecinos coinciden en la queja y piden que el acerado se arregle de forma urgente, mientras el ayuntamiento dijo ayer haber remitido la queja a la empresa del agua para informarse del porqué del mal estado de este acerado, pero ayer tarde no había obtenido respuesta.