Llevan más de dos meses aguantando el olor a aguas fecales, debido a que una parte del garaje de 100 plazas de la segunda fase de viviendas sociales de Gabriel y Galán, permanece semi inundado. El encharcamiento proviene de los sanitarios de las viviendas situadas sobre la zona de aparcamientos que ha ido a parar a los garajes.

Una docena de vecinos de estas viviendas, que fueron entregadas por la Junta de Extremadura hace 20 años, han recurrido a la Oficina Comarcal de la Vivienda para interponer una serie de escritos, pero ha sido inútil. El atasco de aguas fecales continúa, así como las diferentes goteras en los patios de luz, que caen al garaje en cuestión y lo inundan aun más.

"Desde la oficina comarcal nos dicen que no hay dinero para arreglarlo y que da igual cuántos vayamos a enviar escritos porque no va a poder ser", comenta una de las vecinas afectadas, que remitió uno de los escritos el pasado 24 de febrero. "Los malos olores son inaguantables, además de que hay varias plazas de aparcamiento inutilizadas" Los vecinos aseguran que son muchos los que optan por dejar el coche en la calle por el agua y el fuerte olor.

La asociación de vecinos de Gabriel y Galán también denuncia esta situación y desde el colectivo aseguran que "estamos cansados de este problema que llevamos sufriendo mucho tiempo". El colectivo afirma que "la Junta es consciente de esta problemática", porque en otra fase de viviendas sociales donde existía este mismo problema, "ya lo han solucionado", pero no así en la segunda fase, que alberga cien viviendas entre los bloques que van del 121 al 129 de Gabriel y Galán.

RECLAMACIONES El problema parece que radica en el sistema de tuberías. "Son unas tuberías muy pequeñas, que se atascan rápidamente; habría que cambiarlas y ponerlas nuevas". De hecho, en su momento, la Junta selló las arquetas para que no saliera el agua y fueron a desatascar, pero el problema volvió a aparecer al poco tiempo.

Por eso, los vecinos reclaman al gobierno regional que cambie las tuberías "para zanjar el problema de una vez por todas, porque en verano, con el calor, el olor es inaguantable". El colectivo vecinal también reclama a la Junta que revise los canalones de recogida del agua de lluvia porque fallan, con lo que el agua cae por las fachadas y esto provoca humedades.