Un policía local pone una multa por aparcamiento indebido en abril del 2004 y el conductor no recibe la notificación hasta justo un año después, aún cuando legalmente el ayuntamiento dispone de un máximo de tres meses para hacerlo. Este es un caso significativo, pero hay muchos más. Tal es la situación que son ya varios los afectados que han recurrido la multa por estar prescrita y la oficina de recaudación ha tenido que darle de baja.

Los que desconocen la normativa, sin embargo, pagan religiosamente. El artículo 81 de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial advierte de que las infracciones leves prescriben a los tres meses desde la fecha en que se impuso la multa y que la prescripción debe aplicarse de oficio.

No es la primera vez que el concejal del PP Félix Macías pide al ayuntamiento que lo corrija. "Que los concejales de Policía y Hacienda --dijo ayer-- den instrucciones para agilizar la gestión". Mientras el edil de Hacienda, Pablo Sánchez del Mazo, admitió desconocer la situación, y el de Tráfico y Policía, Blas Raimundo, lo reconoció, pero aseguró que las multas prescritas datan de cuando Pepa Camisón era su antecesora en el cargo.