No fue en enero, como informó erróneamente la gerencia del área de salud de Plasencia, sino el 7 de noviembre, cuando se incorporó a su plaza la única dermatóloga con la que cuenta el hospital Virgen del Puerto desde que, en el mes de junio, la otra plaza del servicio quedara vacante al marcharse su titular.

La facultativo había estado de baja dos meses, mientras desde hace ocho hay una plaza vacante, por lo que «yo no soy la responsable de la lista de espera», subraya. Durante la mayor parte del tiempo ha tenido que asumir en solitario a los pacientes de un área de salud de unos 120.000 habitantes porque, aunque durante un tiempo, pasó consulta un dermatólogo, «iba un día y hasta veinte días después no volvía». La facultativo recuerda que lleva 19 años trabajando en el hospital y nunca había estado de baja.