En septiembre del año 2014, el Ayuntamiento de Plasencia estrenaba tres rutas para caminar, correr y montar en bicicleta por los paseos del Arroyo Niebla, una infraestructura cuyas obras ejecutó la Confederación Hidrográfica del Tajo y que entonces aún no se habían recepcionado. Han pasado cinco años y algunos usuarios han denunciado diversos desperfectos que merman su capacidad de uso y dan una «sensación de abandono».
Lo más llamativo es que han desaparecido dos farolas que estaban situadas junto al paseo de la margen izquierda del arroyo. En su lugar, se han colocado piedras para tapar la base de las farolas. Pero además, en torno a una veintena de farolas situadas en la margen derecha no tienen luz.
Esto supone que, «una vez que se hace de noche, ya no se pueden utilizar los paseos debido a la oscuridad que hay. Es una pena, con lo valiosa que es esta zona», lamenta un usuario. Porque se utiliza a diario, tanto para caminar, como para correr y montar en bicicleta, desde profesionales a familias.
Además, los más asiduos a los paseos han señalado que parte del mobiliario urbano está dañado y se puede ver algún banco sin respaldo. Igualmente, falta algún listón de madera de las vallas que separan el paseo del arroyo y es posible ver «defectos de obra» en algunos tramos donde el suelo se ha levantado.
El ayuntamiento es el responsable de la zona desde que la recepcionó, pero ayer no fue posible contar con una valoración municipal sobre la situación de los paseos y las quejas.
Fue la Concejalía de Deportes la que, en el 2014, diseñó tres rutas para promover su uso. Una circular, de un total de 5.665 metros, que parte de la plaza principal, junto al Cachón, donde está el kilómetro 0. Otra conectada con la circunvalación sur, de unos 13 kilómetros de distancia y una tercera desde el arroyo, pasando por el paseo fluvial hasta la presa, de 12, ida y vuelta.
