Lo que empezó en la madrugada del miércoles siendo una pelea entre jóvenes de San Lázaro a puñetazos y mordiscos acabó a primera hora de ayer en un tiroteo con dos heridos, que están fuera de peligro, y la detención del presunto agresor. La Policía Nacional investiga si se trató o no de un ajuste de cuentas entre familias, pero la versión inicial es que el padre de uno de los jóvenes fue a pedir explicaciones al otro pistola en mano y acabaron a tiros, según fuentes policiales.

Balazos que fueron a dar a J.A.M.S., de 65 años, en un brazo y a R.V.V., de 39, en una pierna. Ocurrió hacia las 09.30 de la mañana y rápidamente fueron trasladados al Virgen del Puerto mientras la familia montaba guardia fuera y la Policía Nacional detenía a F.M.F., como presunto autor de los disparos.

DE MORDISCOS A BALAS Los agentes, además, seguían buscaban ayer el arma usada, para lo que la comisaría pidió una orden de registro de su vivienda al juzgado. Según el parte oficial de la Subdelegación del Gobierno, se montó rápidamente un dispositivo de seguridad en el mismo cerro de San Lázaro para evitar posibles represalias en el que colaboró la policía local.

La policía judicial estuvo tomando declaración ayer tarde al detenido, quien durante la detención negó los hechos. Se espera que pase hoy a disposición judicial, mientras el estado de los heridos seguía estable. También uno de los jóvenes implicados en la pelea que desencadenó el tiroteo entre los adultos resultó herido en una oreja a causa de un mordisco por lo que fue atendido de madrugada en Urgencias en el hospital aunque pidió el alta voluntaria.

La investigación determinará la causa de la reyerta aunque la policía no descartó ayer un asunto de drogas dado el escenario en el que se produjo y a que el detenido tiene antecedentes policiales por droga. Tampoco era desconocido para la policía uno de los jóvenes involucrados, pero por conducir sin tener carnet.