El alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, desglosó ayer su prometido plan de austeridad, con el que el gobierno local asegura que se producirá un ahorro anual de alrededor de 500.000 euros para las arcas municipales. Un dinero que, según Pizarro, se destinaría a políticas de creación de empleo, prioritariamente.

El plan de austeridad se basa, principalmente, en la reducción de los ediles liberados --que son dos: la concejala de Servicios Sociales, Igualdad, Dependencia y Juventud, Sonia Grande, y el edil de Urbanismo, Empleo y Empresa y que también asume la portavocía del gobierno, Saturnino Corchero-- y en la reducción de las comisiones informativas, que serán la mitad que en la anterior legislatura. En total habrá cinco comisiones informativas (entre ellas Hacienda, Asuntos Sociales, Urbanismo y Educación), por las que cobrarán por asistencia 5 ediles populares, 2 socialistas y los concejales de UPEx e IU.

Por otro lado, Pizarro elimina la retribución por asistencia a las comisiones del Pepri (Plan Especial de Protección del Recinto Intramuros), de Compras y de Contrataciones y las mesas de contratación y de negociación. Por la comisión especial de Compras y Contrataciones, que Pizarro recupera de la época del exalcalde José Luis Díaz, pasarán todos los gastos que superen los 6.000 euros "para que exista una transparencia absoluta en todas las contrataciones que haga este ayuntamiento", aseveró el nuevo alcalde.

Pizarro también reducirá el personal de confianza, de 7 a los 5 actuales, lo que supondrá un ahorro de 40.000 euros anuales; también habrá una rebaja del 32% en la asignación a cada grupo municipal y del 38% en la asignación que reciben los grupos por el número de concejales que los componen, así como en los salarios. Se reducirán un 5% las retribuciones tanto del alcalde como de los ediles, así como de la cantidad que perciben los miembros de la corporación por asistencia a plenos y comisiones.

Todos estos aspectos se engloban en un plan de choque que también prevé una racionalización del gasto general, poniendo límites al gasto de telefonía móvil y revisando los alquileres que tiene el ayuntamiento para ofrecer determinados servicios en dependencias municipales. Por último, el alcalde, volvió a referirse a una nueva modificación del artículo 27 de las bases de ejecución del presupuesto, para eliminar ña aprobada por el anterior gobierno, para que las arcas municipales sufragaran las costas procesales derivadas de los procesos judiciales en los que se vieran inmersos políticos y técnicos municipales.

ANALISIS DE CUENTAS Pizarro volvió a señalar ayer que el endeudamiento del consistorio ronda el 100%, por lo que se hace necesario amortizar la deuda y reducirla al 75%, "para volver a poder solicitar créditos". Según un primer análisis de las cuentas municipales "ha habido un serio problema de gestión financiera y a 31 de diciembre este consistorio tendrá que devolver varios créditos con altos intereses" argumentó el alcalde.

Después del verano, se presentará el análisis derivado de la auditoría interna, pero Pizarro abrió la puerta a la ejecución de una auditoría externa parcial "en determinados servicios que nos son muy difíciles de auditar", como es el caso de la ejecución de los fondos europeos, "porque el interventor tiene mucha dificultad para acceder a ese gasto" explicó el alcalde.