El fiscal pide para el presunto ladrón J. J. S., seis años y dos meses de prisión por haber cometido, según consta en las conclusiones provisionales, tres robos en otras tantas viviendas en un espacio de 24 horas.

El acusado, que tiene antecedentes penales por haber cometido un delito de robo con fuerza en las cosas en grado de tentativa hace dos años, padece una fuerte dependencia a las drogas.

LOS HECHOS El primero de los robos tuvo lugar en la medianoche del 20 de septiembre, cuando el acusado accedió a una vivienda en la avenida de Salamanca trepando hasta el balcón. Aún con sus propietarios durmiendo, fue capaz de sustraer una cartera, treinta euros y un reloj de pulsera antes de salir por donde había entrado, aunque en la huida perdió sus zapatillas de deporte.

En la madrugada siguiente, el procesado volvió a escalar para entrar en otro piso, en este caso situado en la calle Rodrigo Alemán, al que penetró a través de una ventana ubicada a tres metros del suelo. Una vez en el interior, robó una cámara digital, un teléfono móvil y una cartera, que contenía una cantidad de dinero sin determinar y varios documentos.

Pocos minutos después, el acusado utilizó un canalón para acceder a otro inmueble, en la travesía de Monfragüe. Sin embargo, en esta ocasión el propietario sorprendió al extraño agachado en una esquina. En ese momento, el ladrón se avalanzó sobre el dueño de la vivienda causándole erosiones múltiples superficiales, para a continuación escapar a toda prisa. En la huida, perdió nuevamente las zapatillas, que quedaron enganchadas en la base del canalón.

Esa misma noche, la policía inició una investigación en San Lázaro para tratar de localizar al autor, que finalmente fue encontrado en el interior de su vehículo. Al proceder a su identificación, los agentes comprobaron que el acusado tenía en su poder varios de los objetos robados y que carecía de calzado, procediendo a su detención.