A finales de este mes podría estar aprobada la nueva normativa que regula la tenencia de animales de compañía y los potencialmente peligrosos. Incluye novedades respecto a la ordenanza actual, como el establecimiento de un precio público que deberían pagar los dueños y que revertiría en los animales a través de campañas de sensibilización sobre su cuidado; el fomento de adopciones; el mantenimiento de zonas de esparcimiento para perros; esterilizaciones; la perrera municipal y otras.

Así se refleja en el último borrador que el concejal Luis Miguel Pérez Escanilla ha entregado a los grupos de la oposición y que prevé presentar también a los colectivos relacionados con los animales una vez que pase la feria. El precio público no se ha fijado, aunque Escanilla ha señalado que algún colectivo ha propuesto que fuera de 10 euros.

La idea de elaborar una nueva ordenanza obedece a la necesidad de adaptarse a la nueva normativa y también para "lograr una convivencia lo más pacífica posible", según indica el texto. Recoge además la novedad de la creación de un censo de animales potencialmente peligrosos, unida a la obligación de tener una licencia especial.

Otros aspectos llamativos son la prohibición de la instalación de circos que utilicen animales en sus espectáculos, al igual que las atracciones de feria y tómbolas en el mismo sentido. Esto sería considerado como una infracción muy grave a la normativa, sancionada con multas desde los 501 hasta los 1.500 euros.

Por otro lado, la siempre polémica obligación de recoger los excrementos de los perros de la vía pública se considerará una falta grave y la multa sería de 251 a 500 euros. En este sentido, también se dice que los dueños "deberán evitar las micciones en fachadas y mobiliario urbano" por parte de sus animales.

La norma mantiene aspectos como la obligación de llevar a los perros con correa salvo en los espacios habilitadas para ir sueltos. Señala 4o donde pueden estar sueltos las 24 horas y 6 donde estará sujeto a un horario. No pueden estar en un radio de 5 metros de las zonas infantiles y en La Coronación, en los paseos.

El borrador, que de momento ha sido bien valorado por la oposición, incluye también la posibilidad de cambiar multas por trabajos relacionados con la protección animal y el seguimiento de la ordenanza cada dos años.