La concejalía de Urbanismo y Obras trabaja contrarreloj para encontrar una empresa interesada en acometer la segunda fase de las obras con el horario solicitado ahora por los comerciantes, esto es, de siete a once de la mañana y de dos a seis. "Pero me temo que va a ser difícil y entonces tendrá que ser con el horario normal de la construcción" advirtió ayer la concejala, Mónica García, al presidente de la Asociación de Comerciantes Zona Centro, José Luis Iglesias.

No en vano la obligación de trabajar ininterrumpidamente hasta la noche que marcaba el pliego de condiciones ahuyentó a las empresas porque no ofertó ni una. Lo que no dudó la concejala es que las obras empezarán ya después de Semana Santa aunque su intención es que en el plazo máximo de dos semanas estén adjudicadas. "Antes no sólo no merece ya la pena por cuestión de tiempo --explicó-- sino que tampoco interesa levantar una calle tan céntrica cuando más turistas vienen y por donde pasa, además, una procesión". Eso sí, confirmó que el plazo de ejecución será de un mínimo de seis meses.