Este fin de semana seguro que lo recordarán los vecinos de la calle Pablo Iglesias. Hasta cuatro fuegos de pasto se han producido en la zona en tan sólo dos días y, aunque no han provocado daños materiales ni personales, se han quemado cerca de 9.000 metros de pasto, según informó ayer el jefe del parque de bomberos.

El primero de los incendios se originó en torno a las 12.30 horas del viernes y, pese a que fue sofocado por los bomberos, éstos tuvieron que acudir de nuevo por la tarde a la misma zona para extinguir otro. Sin embargo, la situación más grave se produjo el sábado, ya que de nuevo saltó la alarma pasadas las tres de la tarde en las traseras del colegio de las Josefinas. En este caso, los bomberos no pudieron acudir y fueron los propios vecinos los que, a base de cubos de agua y otros sistemas, se vieron obligados a apagar el fuego ante el riesgo de que las llamas afectaran a las viviendas más próximas.

La razón de que los bomberos no pudieran atender el aviso fue que varios camiones habían salido a sofocar un incendio en la carretera de Malpartida y uno sufrió un percance en una rueda, por lo que fue necesario enviar otro camión y eso motivó que el parque se quedara vacío. No es la primera vez que ocurre, pero en esta ocasión pudo haber tenido graves consecuencias si los vecinos no hubieran apagado el fuego de Pablo Iglesias. Pese a todo, el mismo sábado a las 18.45 horas se produjo un nuevo incendio en la zona que sí sofocaron los bomberos.

PERSIANAS ARDIENDO

A estos incendios se unió otro que tuvo lugar el viernes en torno a las cuatro de la tarde en la avenida Dolores Ibárruri. También en este caso fue un fuego de pasto, que afectó a las proximidades de la asociación de vecinos de Gabriel y Galán. Se quemó el pasto próximo y las llamas llegaron a quemar las persianas del centro cívico. También en este caso colaboraron los vecinos de unas casas unifamiliares anexas.