Desde el mes de noviembre, el ayuntamiento no ha podido avanzar en el informe que debe avalar ante la Junta la petición de zonas saturadas de bares para las calles Cartas, Patalón, Santa María y San Martín. Lo desveló ayer el alcalde, que culpó directamente a vecinos de la asociación Intramuros, la misma asociación que ha pedido públicamente esta declaración, e incluso informó recientemente de haber solicitado a la Junta una medición de ruidos en las calles de ocio durante las madrugadas de los fines de semana.

"Tenemos paralizado el informe porque algunos miembros de la asociación Intramuros no permiten medir los ruidos que tienen que avalar el informe técnico. Nos hemos encontrado con un obstáculo que no entiendo porque quien pide la declaración es quien no permite hacer las mediciones", subrayó ayer Fernando Pizarro.

El problema se ha producido en la calle Cartas, donde los técnicos no han podido entrar en dos domicilios próximos a una discoteca para realizar las mediciones que prueben el alto nivel de ruidos y avalen la petición a la Junta. Esto a pesar de "las reiteradas peticiones del ayuntamiento para poder llevar a cabo las peticiones, la última de noviembre del 2012", señaló Pizarro. Por eso, afirmó que, en este punto, "el ayuntamiento no puede hacer más y la competencia es del ayuntamiento, pero así no podemos avanzar en el informe", insistió.

Por lo tanto, a día de hoy, cualquier empresario podría abrir un nuevo local en estas calles, ya que la declaración lo que impediría sería la apertura de nuevos establecimientos, no el cierre de los existentes. Respecto a cierres, el alcalde también informó ayer de que avanza el expediente municipal encaminado al cierre de un local de copas situado en la calle Santa María, que recientemente fue sancionado por superar el horario. No obstante, las razones del cierre serían administrativas, relativas a falta de licencias.

El propio alcalde anunció en mayo del 2012 la intención de pedir a la Junta la declaración de zonas saturadas de ruidos para las cuatro calles, una petición que ya antes le había realizado la asociación Intramuros. Esta ha recurrido también al Seprona y la Junta para "tener un análisis técnico del ruido producido en las calles de ocio".