Los polémicos pivotes magnéticos debían quedar instalados en los accesos al centro histórico este mes de septiembre porque así lo acordó hace ya un año la comisión del Plan de Excelencia Turística que integran el Ministerio de Economía, la Junta de Extremadura y el ayuntamiento. Pero en todo este tiempo no se ha hecho ni el proyecto técnico y ahora el nuevo gobierno del PSOE duda de seguir adelante porque su intención es no tocar el tráfico hasta disponer de un plan de reordenación.

Pero no es el único retraso del plan de excelencia porque si la tercera fase en la que iban los pivotes no ha empezado, para la segunda el ayuntamiento ha tenido que pedir una prórroga de seis meses porque ni la nueva iluminación de la plaza Mayor ni las excavaciones de Santo Tomé han concluido.

La alcaldesa, Elia Blanco, conoció esta semana el parón que sufre el plan durante una reunión de la comisión donde se llevó la reprimenda del ministerio y la Junta como representante actual que es del ayuntamiento. "Una se siente mal --indicó-- y me he comprometido a desbloquear la situación en un mes y a dinamizar la gerencia, que nos lo han exigido también".

EN JUEGO LAS SUBVENCIONES

Si bien la alcaldesa añadió que "más allá aún de la gerencia, la responsabilidad política del anterior equipo de gobierno es ineludible". El problema radica no sólo en el retraso en sí de los proyectos, sino en que están en juego las subvenciones que aportan el ministerio y la Junta si el ayuntamiento no cumple su parte, según han advertido los técnicos municipales.

De hecho, los representantes de ambas administraciones en la comisión de seguimiento advirtieron también de que otras ciudades con plan de excelencia como Cáceres están avanzando mientras en Plasencia lo más que se ha hecho es sustituir los paneles informativos por otros bilingües porque el resto son proyectos inacabados como la plaza Mayor, Santo Tomé y los pivotes.