La falta de vehículos policiales obligó el jueves a la policía local a coger sus coches particulares e incluso a parar a ciudadanos para que les llevaran de inundación en inundación a socorrer a los afectados. Tal fue el caos en la ciudad, que los tres únicos coches disponibles mientras los otros tres están en el taller no fueron suficientes.

Sin embargo, el esfuerzo de los agentes suplió las carencias porque fueron muchos los que acudieron antes al turno y los que se fueron más tarde a casa para seguir ayudando desde la una de la tarde en que cayó la tromba de agua. Los bomberos, la policía nacional y el 112 también echaron el resto.

Dos horas después se personaron en Los Pitufos la concejala de la policía y el inspector jefe y curiosamente cuando reaparecieron los ediles de Obras, Barrios y Deportes, desaparecieron los policías locales que habían estado controlando en todo momento el corte de la carretera por parte de los vecinos porque llevaron a su concejala a otras zonas afectadas. Entonces los afectados increparon a la edil de Obras.