Las personas que habían sido citadas este miércoles -primer día laborable tras el festivo local del martes- para la vacuna de la gripe en el centro de salud Luis de Toro de Plasencia se encontraron con que «éramos más de un centenar y todos estábamos citados a la misma hora». Algunos han denunciado públicamente que era «imposible mantener la distancia de seguridad en el espacio que teníamos, ni después, cuando han abierto un portón y teníamos que pasar por un pasillo que era como un callejón».

Afirman que «había muchas personas mayores que han tenido que estar media hora esperando de pie hasta que se los han llevado por otro pasillo y otros, como éramos vecinos, nos hemos organizado nosotros mismos».

Las quejas se centran en la organización, pero no por parte de los sanitarios, que «han dado la cara y han resuelto el papelón» porque aseguran que el mismo personal que había hasta ahora se tiene que encargar de dar cita, poner la vacuna y dar justificantes para el trabajo. «Ha sido un caos y cruzamos los dedos para no habernos contagiado de covid», lamentan.