"Gastar el dinero del contribuyente en esta bobada me parece absurdo, más aun cuando se están recortando muchos servicios públicos". Así se manifestó ayer el exdiputado de IU que el pasado 21 de mayo arrojó billetes falsos a la cara del presidente del Gobierno de Extremadura durante el XXX Aniversario de la asamblea regional y ante la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Santamaría, tras declarar como imputado por alteración del orden público.

Agustín Real llegó al juzgado número 3 acompañado por familiares y amigos y "no he negado absolutamente nada", es decir, que el día 21 estuvo en la asamblea y que le arrojó los billetes a José Antonio Monago. "Le he dicho al juez que lo hice porque hay una realidad paralela en las instituciones con respecto a la calle y quería mostrar mi protesta e intentar hacerle saber en su casa que la calle no tiene nada que ver con el parlamento".

Por este motivo, fue detenido por la Policía Nacional en Mérida y su informe es el que ha llevado al juzgado de Instrucción número 1 de Mérida a pedir la declaración de Real en Plasencia por una falta de alteración del orden público. Ayer declaró como imputado y en opinión del exdiputado, "no he alterado ningún orden porque Monago sigue siendo presidente del Gobierno de Extremadura. Solo fue un gesto, otra cosa hubiera sido que yo hubiera alterado el orden hasta el punto de que Monago no fuera hoy presidente, ojalá".

Real espera que el juzgado emeritense archive la cause y no abra un procedimiento que supondría la celebración de un juicio. "Ahora toca esperar", dijo.