El ayuntamiento acusa a la empresa de basura de no cumplir el pliego de condiciones y la contrata se escuda en que éste, a dos años de los diez para los que se firmó, se ha quedado desfasado con el crecimiento de la ciudad. Pero el hecho objetivo es que sólo nueve empleados tienen que apañárselas cada noche para recoger las cerca de 70 toneladas que genera una ciudad de casi 40.000 habitantes.

Se trata de seis peones y los conductores de los tres camiones grandes de recogida que los lunes se refuerza con un vehículo y tres empleados más dada la acumulación de basuras porque los sábados no hay servicio. De manera que el fin de semana arroja más de 80 toneladas de basura con lo que no dan abasto y la empresa ha reconocido que debían terminar a las seis de la mañana y a las nueve aún hay basura en la calle.

Esto fue lo que ocurrió el lunes en la avenida de la Vera, Santa Elena y aledaños, cuyas asociaciones de vecinos y comerciantes han mostrado su indignación hasta el punto de que reclamaron ayer al ayuntamiento una solución. "Si la empresa no da abasto no es problema de los ciudadanos, pero por qué el ayuntamiento no exige porque es que esto es tercermundista" preguntó la presidenta vecinal, Guadalupe Blázquez. José Luis Ventura, vicepresidente del comercio, denunció que "los vecinos no nos merecemos esto, que ya pagamos bastante de basura".