La mayoría de los hosteleros de la zona centro de Plasencia consultados por este periódico consideran que el festivo del lunes de feria debería ser eliminado, porque la afluencia es muy escasa. De hecho, la plaza Mayor lucía ayer al mediodía como cualquier otro día, si no fuera por la Asociación de Tamborileros que se mantuvo fiel a su cita y por los puestos instalados. Solo el recinto ferial se llenó por la tarde de aquellos que querían apurar los últimos momentos de un día festivo.

La mayoría coincide en señalar que el llamado lunes de resaca solo contribuye a aumentar el éxodo masivo a la playa y por eso varios bares de la zona decidieron cerrar ayer sus puertas, sencillamente porque no les sale rentable, como el caso de La Bodega de San Esteban o El Tren. El representante del sector de la hostelería en la Federación Empresarial Placentina, Felipe Doncel, asegura que de la feria "hay que replantearse muchos aspectos y entre ellos suprimir el festivo del lunes. "Se produce una situación extraña al haber retrasado el pregón inaugural al jueves, porque todo el mundo está de feria el jueves a la hora de las cañas" argumenta Raúl Paniaga de La Pitarra del Gordo.

Un año más las cañas han vuelto a ser uno de los atractivos de la feria. La afluencia ha estado muy repartido entre el jueves y el domingo, "aunque el sábado sigue siendo el mejor día2 afirma Juan Castellano de El Globo. "El balance de este año ha sido bastante mejor de lo esperado, dada la situación económica, y mejor que el del año pasado". Castellano explica que el centro se ha convertido en una gran caseta de feria y que la forma de ocio está cambiando.

El hecho de que el traspaso de poderes haya coincidido en mitad de la feria, el pasado sábado 11 de junio, ha originado un cierto descontrol con las barras exteriores de los bares del centro y la música, en algunos casos atronadora, aunque la mayoría de los hosteleros han optado por intentar coordinarse entre ellos en este aspecto. Otros optaron por innovar un poco, como el bar Manjuli que contrató un pinchadiscos, que se instaló en el balcón del local.