La imagen de coches aparcados delante de la catedral vieja y en las plazas de San Nicolás, Mayor y San Martín tiene los días contados. El concejal de Tráfico, Francisco Martín, anunció ayer la decisión municipal de suprimir 55 plazas de zona azul entre estas zonas y la calle Blanca, respondiendo así a los deseos de su socia de gobierno, Victoria Domínguez, quien hace unos días instó públicamente al gobierno del PSOE a eliminar la zona azul en San Martín --aprovechando que está en obras-- en la catedral y en San Nicolás.

Pero ayer, Francisco Martín no aludió a su socia sino a una de las medidas del plan de tráfico --la de peatonalizar progresivamente el casco histórico-- para justificar la supresión de estos aparcamientos, que se sumarán a los ya eliminados en las plazas de San Esteban y Ansano.

De las 55 plazas a eliminar, 22 corresponden a la plaza y la calle de San Martín; nueve a la fachada y el lateral de la catedral vieja, aunque en la parte baja aún se podrá aparcar; 10 a San Nicolás, cinco a la calle Blanca, donde solo podrá aparcar la policía judicial y el resto a la plaza Mayor, donde sí se mantendrán las plazas de la Policía Nacional, según informó el concejal. El resto de los espacios se reubican en la ronda Higuerillas, aunque Martín dijo que provisionalmente, sin aclarar hasta cuándo.

Sin embargo, esto no significa que se amplíen las plazas para aparcar que ya existen en Higuerillas, un total de 64, sino que se reconvierten en zona azul.

El concejal indicó que estos cambios estarán en marcha una vez que la empresa de la zona azul pinte las plazas e instale el parquímetro y aprovechó para pedir confianza porque el plan de tráfico "no va a parar".