La Archidiócesis de Mérida-Badajoz ha explicado este miércoles sus cuentas, estructura y actividad durante el periodo de 2018, en el que destacan los apartados de los ingresos con más de 12.762.000 euros, los gastos con más de 12.554.000 euros o la actividad socio-caritativa con 22.406 personas en 34 centros sociales.

El ecónomo diocesano, Julián Peña, ha detallado en rueda de prensa que los gastos se dividen en un 36 por ciento para retribuciones del clero y del personal seglar y casi un 26 para actividades asistenciales, seguidas de conservación de edificios y gastos de funcionamiento, actividades pastorales y gastos extraordinarios.

Respecto a los ingresos, Peña ha destacado que en aportación a los fieles sería un 84 por ciento, casi siete millones de euros, de los que un 54% es por aportación directa de colectas o cuotas y el resto de la asignación tributaria.

También reciben casi dos millones de euros en subvenciones, ingresos de patrimonio y otras actividades y extraordinarios.

En comparación con las cifras del 2017, el pasado año aumentaron tanto los ingresos (847.000 euros) como los gastos (677.600 euros).