Ramón Pérez tuvo la idea que, con el respaldo económico y moral de los hermanos Diego y Luis Marino Fernández, naturales todos ellos de Aldeanueva de la Vera, consiguieron registrar en el año 1994 convertida en un dispositivo que han definido como Corte en superficie: RALU , todo un invento que permite ahorrar "grandes cantidades de agua, al no ser necesario vaciar la red general para reparar las averías" que se producen entre la red y el contador, explica Ramón Pérez.

En realidad señala que se trata de un dispositivo de corte en superficie en acometidas de agua, mediante la utilización de un accesorio móvil, giratorio y telescópico, que pese a que "se lo hemos presentado a varias empresas del sector, todavía no ha sido aceptado por ninguna de ellas, por motivos económicos, aunque todas han reconocido que se trata de un invento que hasta ahora es único, con la particularidad de que puede ser aplicado fácilmente".

Por lo que respecta a su funcionamiento, Pérez dice que "dicho dispositivo se acopla a la válvula de la acometida, lo que hace que transmita los movimientos de la válvula al exterior, de forma giratoria, lo que permite el cierre o la apertura de la misma". Además al ser telecóspico, se adapta fácilmente a las irregularidades de la zanja o del terreno por donde discurra la tubería dañada, así como donde se produzca aumento o disminución del terreno con un desarrollo de un metro de margen.

En el capítulo de ventajas que ofrece el invento de los tres emigrantes pencones, residentes en Madrid y Barcelona, respectivamente, se incluyen rapidez de corte y restablecimiento del servicio de agua, "al estar el dispositivo de apertura y cierre en el exterior. lo que permite su utilización, como si de un grifo normal se tratara". Además, la rapidez de corte permite que los trabajos de reparación se puedan realizar en seco, sin alterar el suministro a los usuarios del perímetro afectado, "excepto al que lógicamente sufre la avería".

El autor de la idea que pretende reducir el gasto inútil del agua está convencido de que si a todo esto añadimos su sencilla colocación y el reducido coste "podemos asegurar que el dispositivo de corte Ralu, que también puede ser utilizado por los ayuntamientos, es de gran utilidad, siendo una novedad mundial y pionero en España".

Ramón Pérez, que cuando concibió el invento se dedicaba al montaje y reparación de tuberías de agua, ha adelantado que va a para en su empeño de dar a conocer el invento que facilita la reparación de averías, "además ser muy positivo para el medio ambiente". Por este motivo seguirá llamando a las puertas de las grandes empresas, "con el fin de encontrar alguna que pueda estar interesada en utilizar el dispositivo de corte para el arreglo de averías en presión".